La coca de Sant Joan es uno de esos postres suficientemente deliciosos como para comerlos todo el año, pero que desgraciadamente solo disfrutamos unos cuantos días al año señalados debido a que está asociado a la festividad que da paso al verano, la llamada “ revetlla de San Joan”, también conocida como “nit del foc” o nit de les bruixes”.
Sant Joan es una de las festividades más importantes de Catalunya, de origen antiquísimo y pagano, marca la llegada de la temporada estival y muchos la celebran en la calle haciendo hogueras y tirando petardos.
La coca de Sant Joan admite muchísimas variaciones, des de la de azúcar y piñones, hasta de la crema y frutas o la de chicharrones. Un rico dulce especial para un día especial que no requiere ser un masterchef para elaborarse. Prepara tu propia coca de Sant Joan.
Ingredientes
Para la masa:
- 250 g – Harina de fuerza
- 100 g – Azúcar
- 100 g – Mantequilla
- 2 – Huevos
- 20 g. – Levadura en polvo
- 1/2 – Vaso de leche
- 1 – Rama de canela
- 1/2 – Piel de limón rallada
- Piñones
- Fruta confitada variada
Para la crema:
- 1/2 l de leche
- 1 vaina de canela
- 125 g de azúcar
- 40 g de fécula de maíz (Maizena)
- 4 yemas de huevo
Elaboración de la crema
Se calienta la leche juntamente con la vaina de canela (adicionalmente podemos poner un poco de ralladura de limón para dar un toque cítrico) para que la leche quede aromatizada.
Por otra parte mezclamos el azúcar con la maizena, dejando una mezcla homogénea a la que posteriormente añadiremos las claras del huevo para conseguir una pasta .
Retiramos la vaina de canela y mezclamos la leche infusionada con la masa. Se pone a calentar ligeramente hasta conseguir que la pasta quede espesa.
Tapamos con papel film para evitar que haga crosta y a continuación introducimos en la nevera.
Elaboración de la masa
Ponemos una olla a fuego muy lento con la leche y la levadura sin dejar que hierba, una vez este caliente retiramos la olla y añadimos tres cucharadas de harina. Removemos la masa hasta conseguir una pasta lisa y homogénea.
Por otra parte mezclamos en un bol la harina, la mantequilla, los huevos, el azúcar, la sal y la ralladura de limón. Trabaja la masa insistentemente hasta conseguir una pasta y a continuación añádele la masa anteriormente elaborada para conseguir una masa compacta.
Con la mano o la ayuda de un rodillo extendemos la masa sobre la bandeja del horno dejando 1 cm de altura, es importante untar la bandeja con aceite o harina para que no se pegue la masa.
Posteriormente pintamos la masa con huevo y añadimos la fruta confitada , la crema pastelera y los piñones. A tu gusto. Déjala reposar hasta que suba de volumen.
Horneamos durante 25 minutos a 150 grados, hasta que quede dorada y tierna al tacto.